A sus 8 años Jacqueline Zuluaga ya tenía claro cuál era la profesión que ejercería más adelante. Con un brillo en su mirada y haciendo un viaje al pasado relata que, cuando pasaba por las peluquerías, su atención se concentraba en cómo realizaban los peinados, quizás como cuando un niño de escasos recursos pasa por las vitrinas de un almacén y ve el juguete de sus sueños, “yo decía esto tiene que ser lo mío”.
Por: Maria Londoño.
Con la persistencia que caracteriza al granadino, empezó a darle vida a su sueño. Inició peinando a sus primas y haciéndose sus propios peinados, sus papás al ver su motivación, “me compraron un cabezote y ahí fue donde practiqué más”, con el pasar del tiempo y con mayor destreza ya eran más las personas que la buscaban para que les hiciera los peinados.

Mientras a unos la pandemia los paralizó, para Jacqueline fue la oportunidad para dedicarse por completo al peinado y su otra pasión, el maquillaje. Su talento se fue perfeccionando gracias a su constancia maquillando amigas, primas e incluso a ella misma, poniendo en práctica los tutoriales que veía en youtube.
Su mayor satisfacción al finalizar cada uno de los maquillajes o peinados es “ver el resultado y decir en realidad yo lo hice. Yo me quedó asombrada, ver la cara de felicidad de mis clientas cuando terminó algún maquillaje, es muy lindo cuando ellas salen y me dicen: ¡Me gustó mucho! ¡Me duró todo el día! ¡Ay, Jacque, quiero volverme a maquillar contigo! Eso me llena el corazón”.
Su formación en la academia le ha permitido perfeccionar su arte, con el que se sueña tener su propio salón de belleza y trasmitirle sus conocimientos a personas que, como ella, les apasione esta profesión; mientras tanto se seguirá capacitando para resaltar la belleza de sus clientas desde su casa. Las personas que deseen apoyar su talento se pueden comunicar al 314 750 02 37.