Al mejor estilo de un hombre aventurero, ‘granadino berraco’, como dice Aloncito Giraldo por los alto parlantes del templo parroquial, un día cualquiera y cansado de escuchar las promesas incumplidas por parte de la administración municipal representada en los diferentes mandatarios que la han encabezado desde hace ya varios años, Alberto Giraldo, conocido popularmente como ‘Cusumbo’, decidió irse a vivir con su familia a su casa ubicada en La Manga del Municipio, que todavía está en forma esquelética o en el lenguaje de los maestros de construcción: en obra negra.
Por: Jeison A. Giraldo.
Pacho Castaño, o ‘Pacho Mentiras’ para referenciarlo mejor, me abordó un día y me dijo “Mazamorro, allá en las casas de la manga del municipio esta viviendo gente. No tienen energía, no tienen agua, no tienen parabólica. Solo tienen teléfono y lo cargan en el bolsillo”.
Yo creí que era una de sus mentiras, como cuando dijo que en Venezuela habían quemado 200 colombianos, y después dijo que los habían quemado porque era que ya se los habían leído. O cuando me dijo que si quería ir a charlar con Carlitos el relojero, tenía que ir al negocio antes de las 4 de la tarde porque el viejo se va a esa hora para la vereda Las Vegas, porque según Pacho, a Carlitos le estaban desviando la quebrada y tenía que ir a celar.

Pero no, se trata del tan famoso proyecto Retornar es Vivir, que se comenzó a ejecutar desde hace varios años y que esta ubicado en la antigua Manga del Municipio, en la salida hacia San Carlos, y aunque ya han pasado varios mandatarios, ninguno ha sido capaz de entregarlo.
“Al principio nos hacían reuniones y nos llenaban de esperanza, nosotros teníamos la ilusión de habitar la casa. Recuerdo que en una de las muchas reuniones que hicieron, nos dieron un llavero, lo cual lo vimos como una burla y les dijimos que nosotros para que eso, que nosotros lo que queríamos era la casa”, me contó Alberto con una cara resignada, una que ya no tiene tiempo de pensar en ese mal rato.
Las casas además de en forma esquelética, también las encontraron saqueadas, porque entre otras cosas, los borrachos aprovecharon la situación para ir y hacer sus fechorías allá, aprovecharon para armar camas improvisadas y hasta lograron sacar contadores, lavamanos y baños. De algunas casas a Alberto le tocó sacar incluso botellas de cerveza.
Al pobre Cusumbo le ha tocado liderar convites para hacer zanjas porque algunas casas se estaban inundando, además le tocó ayudar a cambiar la red de tubería que les pusieron para que llegara el agua a las casas, porque la que les pusieron inicialmente era muy deplorable; todo esto porque él entiende de construcción y fue quien revocó su casa y la de algunos vecinos.

Junto con él, han sido ya 7 familias las que se han sumado a esta aventura. Son unas casas que no han necesitado una cinta y la presencia de personas importantes para poder ser inauguradas. “Yo me puse a pensar que con la plata que yo pagaba el arriendo, con eso iba a comprar cosas para terminar de arreglar la mía” dice Alberto Giraldo, quien además me contó que le tocó salirse de trabajar en el carro que conducía para poder hacerle frente al trabajo.
Alberto “Cusumbo”, como líder del sector, ha pensado seriamente en cambiarle el nombre “porque retornar es vivir, ese ya nos tiene cansados”,
La culminación de las casas se ha hecho posible por el propio bolsillo de los beneficiarios, pero se conoce la historia de algunos vecinos que han sido apadrinados por personas pudientes del pueblo que se han puesto a ver la situación y apoyan con recursos a aquellos que no tienen con que hacerle los últimos ajustes a sus hogares.
Hoy aunque todavía falta mucho por ajustar, los habitantes de ese sector no ven la hora de tener al 100% sus casas y hacer realidad el sueño de todos los que una vez pensaron que “Retornar es vivir”.