Hace pocos días, cuando tuve la oportunidad de contarle a los muchachos de Trabajo Social de la UPB sobre todo lo que realizamos en Granada Stereo, hubo un momento en el que me quedé pensando en una época que fue muy aguda para la emisora.
Por Jeison A. Giraldo.
Es que hay veces que estudiantes de universidad o colectivos particulares vienen a Granada de pasantía y hacen un recorrido por las diferentes instituciones del municipio, conocen todo su quehacer y sus visiones.
La época de la emisora que me llamó la atención en ese momento, tiene que ver con que nació en medio de la guerra y, aun así, no dejó de tener un impacto positivo para el municipio.
En tiempos cuando la comunicación era prácticamente nada, en buena hora apreció este medio de comunicación. Los celulares no existían, y las escaleras, para poder mandar alguna razón a familiares en las veredas, tenían un horario semanal que no permitía estar en constante comunicación.

La emisora, aunque iniciando, se sostuvo y siguió con su misión a pesar de todo; los grupos armados sostenían intensos combates y la emisora sirvió para que en la zona rural los demás habitantes se dieran cuenta de que en el casco urbano estaba pasando algo malo.
En la emisora cuando iniciaban los enfrentamientos, el locutor que estaba de turno lo que hacía era suspender la programación habitual y ponía el rosario o música religiosa.
25 años después, la emisora Granada Stereo sigue siendo una opción importante para los paisanos que están en las diferentes ciudades, la cual les permite mantenerse enterados de lo que sucede en nuestro territorio. Todo esto gracias al sentido de pertenencia y la valentía de un grupo significativo de muchachos que supieron, con amor por Granada, dedicación y esfuerzo, darle continuidad a este proyecto.