Villa Hermosa y Nueva Generación, los equipos más jóvenes del campeonato y que durante el torneo se impusieron a los otros seis participantes y se colocaron en la disputa por el título, salían a la grama con la intención de ponerse por delante en el marcador.
El partido tuvo tramos a favor para cada uno de los equipos. Mientras la ofensiva de Nueva Generación era punzante, la defensa de Villa Hermosa respondía de manera impecable y viceversa.
El primer tiempo finalizó con igualdad a cero en el marcador, pero desde el arranque de la segunda mitad, los dos equipos estaban decididos a marcar diferencia. El partido se puso de toma y dame hasta que en el minuto 19 del segundo tiempo Villa Hermosa logró ponerse en ventaja desde el punto penalty.
Nueva Generación buscaba la igualdad en el marcador y Villa Hermosa a través de contragolpes rápidos trataba de ampliar la diferencia. Así transcurrió el resto del compromiso hasta que el juez central miró su cronómetro y decretó el final del encuentro.
Villa Hermosa que en el inicio del torneo tenía como objetivo defender el título logrado el año anterior alzaba el trofeo y por segundo año consecutivo como el mejor equipo de la competición.