Por: Maria Londoño.
Relata que este oficio lo ejerce desde hace alrededor de ocho años y continúa narrando, “yo reformo muebles, la cojinería de carros”, y lo completa con su otro talento, la carpintería, “yo hago espaldares, bases camas, salas”.
Su oficio lo desempeña con tal gusto que “yo no lo tomo como un trabajo, esto es un arte, a mí me gusta ver las cosas bonitas y me gusta que lo que yo hago quede bien”.
Para él lo más gratificante es cuando cumple las expectativas de los clientes que le brindaron la confianza, ya sea de reformar o hacer algún producto desde cero.
De los granadinos resalta “de la gente de acá la amabilidad, del pueblo la tranquilidad, el clima, el pueblito es muy amañador”.
Progresar y pensar en brindar bienestar a los demás es común entre los que habitamos Granada, el sueño de Danilo Gómez es que su emprendimiento crezca y así poder generar empleo.